La Pajarera

La Pajarera

Entiéndase bien, La Pajarera no es un insulto, sino el oficio de una señora, sin nombre ni oficio conocido, que todas las mañanas del año, tan pronto como amanece, en invierno y en verano, haga frío o calor, pasea de norte a sur y de este a oeste, uno de los parques públicos más grandes de la capital del reino. Día tras día sin faltar uno solo, su oficio, -más bien militancia-, es muy sencillo: se ocupa de dar de comer a todas las aves- también peces y tortugas- que habitan por los alrededores y estanques del recinto. Creo que además de los patos, palomas, grajos, tortugas, peces… y otras especies similares, que la conocen, esperan y persiguen para conseguir degustar su correspondiente ración de pienso diario; en realidad, mendrugos de pan que porta en una gran bolsa. A veces peleándose entre sí para escoger la mejor parte. La pajarera, a paso militari, no se deja un solo recoveco del parque sin visitar. Me parece por su tarea asistencial la hace merecedora a figurar en la plantilla de mantenimiento del parque público con el titulo oficial de ‘Pajarera’, y, sino que se lo pregunten a los “pájaros” de Podemos.